Viajes VIP para indocumentados, así se le llama ahora al servicio que ofrecen grupos delictivos en los que las personas que quieren cruzar la frontera ilegalmente pagan entre $12,000 y $15,000 por una travesía con ciertos privilegios pero sin garantías de que se llegue al destino deseado.
El pagar más dinero a un traficante de humanos promete una variedad de comodidades y seguridad al cruzar la frontera. Sin embargo, la realidad es que el destino final para la mayoría puede ser mortal.
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La violencia, la pobreza y el COVID-19 han acelerado la migración desde América Latina a Estados Unidos, por lo que expertos afirman que el gobierno debería implementar nuevas tácticas, ya que las establecidas "no están funcionando".
"Mientras que hay una demanda, va a haber gente que lo va estar haciendo. Y desafortunadamente la crisis humanitaria que está ocurriendo, no solo en Centroamérica pero a nivel mundial, pues está causando que las personas se quieran dar a la fuga. El gobierno necesita poder adaptarse para tomar las medidas necesarias porque claramente las medidas que se están haciendo no es algo que estarán de alguna forma convenciendo", explica Alex Martínez, abogado de inmigración.
Mientras tanto, buscando evadir autoridades federales en la frontera los traficantes están optando por maneras más riesgosas, incluido usar los tractocamiones. Sin embargo, las opciones son muy pocas para los migrantes que quisieran hacer sus trámites migratorios.
"Cuando uno ve las consecuencias de lo que ha ocurrido con tanto tráfico de personas, aquí el interés claramente no es el bienestar de la gente, aquí el interés es económico y eso es obvio¨, añade el abogado.
Los cruces desde México alcanzaron una cifra récord de 1.7 millones en lo que va del año hasta el mes de junio, mientras que las cifras de muertes han registrado números históricos con 728 el año pasado.
