McALLEN, Texas.- José Luis González, de 41 años y residente en Edinburg, fue enviado a una prisión federal por seis años luego de que se declarara culpable de haber recibido fraudulentamente los beneficios de desempleo del Departamento de Trabajo (DOL, por sus sigla en inglés), anunció el fiscal federal Alamdar S. Hamdani.
González se declaró culpable el 21 de marzo de 2023.
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Por su parte, el juez jefe de distrito de EE.UU., Randy Crane, ordenó que González cumpla tres años de libertad supervisada inmediatamente después de que complete su condena en prisión. También se le ordenó al convicto pagar $531,161 por concepto de restitución.
En la audiencia el tribunal escuchó pruebas y testimonios adicionales que describían cómo González mantuvo el fraude durante una década y causó pérdidas sustanciales al Departamento de Trabajo y a la Comisión de la Mano de Obra de Texas (TWC, por sus siglas en inglés). La corte también escuchó cómo él retuvo el dinero de los ciudadanos que cualificaban y necesitaban esos beneficios.
"González y otros cometieron un fraude sustancial contra los contribuyentes de Texas", dijo Hamdani. "Creando empresas ficticias, falsificando documentos y, en definitiva, engañando a la TWC, González retuvo dinero de personas que realmente lo necesitaban. Gracias a la labor de las fuerzas del orden, González tendrá que cambiar sus empresas falsas por una celda de verdad", añadió el funcionario.
A partir de agosto de 2008 González ideó un plan mediante el cual presentó solicitudes fraudulentas de seguro de desempleo ante la Comisión de la Fuerza Laboral de Texas. Además, creó y proporcionó varios documentos fraudulentos para solicitar beneficios por desempleo. A continuación, anunció su plan en Facebook, donde reclutó y ayudó a otras personas a hacer lo mismo. Varias personas pagaron a González para que les ayudara a presentar solicitudes fraudulentas de prestaciones por desempleo, añade el comunicado del Departamento de Justicia.
Concretamente, González creaba una cuenta de empleador ficticia en la TWC para incluir un nombre de empleador, una dirección e información similar. La dirección que creaba era la suya o una dirección que controlaba. La TWC enviaba una notificación por correo al empleador ficticio a esa dirección, y Gonzalez se hacía pasar por el empleador y respondía a la carta de la TWC confirmando el empleo ficticio del solicitante. Esto hacia que la TWC generara y financiara una tarjeta de débito y la enviara por correo a otra direccion que González u otro individuo controlaba.
En última instancia, la estafa dio lugar a unas 50 solicitudes de desempleo fraudulentas por un total de 531,161 dólares.
Otras nueve personas también se declararon culpables y ya han sido condenadas.
González ha estado y permanecerá bajo custodia a la espera de ser trasladado a un centro de la Oficina de Prisiones de EE.UU. que se determinará en un futuro próximo.
