Las bajas temperaturas que azotan el noreste de EEUU se cobraron sus más recientes víctimas: las famosas cataratas del Niágara, que se congelaron parcialmente.
Varios turistas captaron en video el martes el impresionante espectáculo.
El frío ártico en el centro y noreste del país está afectando a unas 100 millones de personas.
Expertos explicaron que si bien los bordes de las cataratas pueden congelarse, es prácticamente imposible el cuerpo de agua entero se congele debido al volumen y la velocidad del agua que fluye allí.