COVID-19

Fuerzas armadas patrullan Ciudad de México, tras contagio de policías

Dos de los policías murieron y sus compañeros extreman medidas de prevención.

Telemundo

Dos de los uniformados fallecieron.

MÉXICO - Como todos los días, los oficiales preparan sus armas y equipo para salir a trabajar, y ahora, como parte vital de su actividad, limpian sus manos con alcohol y se ponen sus guantes y cubrebocas.

"Corremos muchos riesgos, pero es nuestro trabajo".

Karla de la Cruz y Diego, su compañero policía, también desinfectan profundamente su patrulla y se colocan caretas porque no quieren convertirse en víctimas del COVID-19, como algunos de sus compañeros.

"Soy mamá, tengo dos pequeños y me preocupa porque no es cualquier contagio", explica De la Cruz.

El gobierno capitalino reveló que desde el 18 marzo, 20 policías han dado positivo a la enfermedad.

En la última semana, cuando arrancó el periodo oficial de distanciamiento social para combatir la pandemia, se reportaron 646 asesinatos y un aumento de los saqueos.

"Dos de ellos fallecieron recientemente, nuestra solidaridad a su familia", dijo la jefa del gobierno de Ciudad de México, Claudia Sheinbaum.

Alrededor de 250 uniformados que estuvieron en contacto con los fallecidos fueron enviados a sus casas por prevención, al igual que 1,400 empleados de la secretaría que están en condiciones vulnerables para contraer la enfermedad.

"Mujeres embarazadas o en periodo de lactancia, personal con diabetes, hipertensión o enfermedades crónicas ya no se encuentran en su centro de trabajo", asegura Omar García Harfuch, secretario de Seguridad Ciudadana.

A los que se quedaron, les proporcionan las herramientas para protegerse, ya que además de su trabajo, también realizan labores de convencimiento para que la gente no permanezca en las calles.

Diez personas fueron arrestadas por los delitos.

Los policías que han tenido que detener sus actividades serán suplidos por cerca de 700 miembros del Ejército, la Marina y la Guardia Nacional, quienes esta semana comenzaron a patrullar las calles del corazón de México.

Los elementos serán desplegados en las alcaldías de la ciudad, sobre todo en las zonas consideradas de riesgo, en el aeropuerto, terminales de autobuses y en los límites con otras entidades.

Los miembros de las fuerzas armadas también vigilarán los hospitales públicos para evitar que el personal médico sea agredido y, de ser necesario, el número de elementos en toda la ciudad podría aumentar.

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