El promedio diario de nuevos casos de COVID-19 en Texas ha disminuido un 17,5% en las últimas dos semanas, de acuerdo a investigadores de la Universidad Johns Hopkins.
El Departamento de Servicios de Salud del Estado de Texas reportó el martes más de 24,000 nuevos casos confirmados y probables de COVID-19, así como 307 muertes adicionales.
Mientras los nuevos positivos parecen ir a la baja, Johns Hopkins indica que más de 35,000 personas con el virus han muerto hasta ahora en Texas, un número que representa el tercero más alto entre los estados.
En las hospitalizaciones también se ha visto una baja tras haber alcanzado niveles récord desde el inicio de la pandemia. Para el lunes, 12,278 personas recibían tratamiento intrahospitalario tras haberse registrado un hito de 14,218 el 11 de enero.
