HARLINGEN, Texas – Continúa la llegada de cientos de migrantes centroamericanos solicitando asilo político en los Estados Unidos y los albergues de la región del condado Cameron están nuevamente registrando un aumento en sus instalaciones.
Algunos directores de albergues se mostraron preocupados ya que dijeron que su capacidad está llegando al límite y han reportado a algunos migrantes positivos al COVID-19.
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De acuerdo con la subdirectora del albergue Loaves and Fishes, Melissa Gutiérrez, en la noche de este martes recibieron a un grupo de 39 migrantes de los cuales cuatro salieron positivos, por lo que tuvieron que ser aislados.
En junio, agentes de la Patrulla Fronteriza arrestaron a 59,380 migrantes en el Valle del Río Grande de los cuales ya fueron trasladados a los albergues de la región.
Actualmente, el Valle del Río Grande sigue siendo el principal corredor para los migrantes de los países centroamericanos, por lo que los directivos de los centros buscan agilizar su paso. Luego de los hechos ocurridos en la operación de otros refugios de esta región, Loaves and Fishes está tratando de tener un mayor control con los casos de COVID-19 mediante la administración de pruebas.
