MCALLEN- La central de autobuses de McAllen nuevamente se vio abarrotada con la liberación de 98 inmigrantes indocumentados, entre ellos bebés, adolescentes y familias enteras.
"Sufrimos bastante porque nos trajeron a todos encerrados. Siempre se escucha el tráiler, verdad. Allí nos echaron. Yo pensé que en bus, pensé que iba a ser el viaje bonito, pero fue horrible," comentó Julio Chocoj.
Julio junto a su pequeña Cristy, abandonaron la pobreza en Guatemala hace unos 12 días. "Desde el 2016 hubo sequía alla. Entonces, tengo que comprar maíz y me doy cuenta que no puedo mantener a mi familia," dijo Chocoj.
Para los 98 inmigrantes, lo más importante es haberllegado a los Estados Unidos con vida para recargar energías e iniciar la búsqueda de sus anhelos lejos de su patria.
Y con un adiós, cada uno toma su camión para comenzar su nueva etapa.