Tanto la fiscalía como la defensa de Richard Molina, exalcalde de Edinburg, aprovecharon la mañana del martes 16 de agosto para afinar los últimos detalles relacionados al caso por fraude electoral previo al inicio del proceso judicial en contra del político.
Oficialmente, no fue hasta la 1:30 pm p.m. que el jurado se presentó en sala para dar inicio formalmente al juicio y escuchar los argumentos de apertura. El político enfrenta 11 cargos de fraude electoral y se espera que al menos 20 testigos se sienten a declarar durante el juicio.
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La primer testigo del caso, Belinda Sagredo, del Departamento de Elecciones del Condado Hidalgo, solo pudo ser entrevistada por el equipo de defensa. Su testimonio sirvió para revisar varias de las formas que se usan para registrar votantes, clarificar cómo es el proceso y qué hay que hacer para registrar a una persona y que esta pueda votar.
Precisamente los cargos que enfrenta Molina implican señalamientos de fraude electoral durante la elección de 2017. Pero no fue hasta 2019 que él, su esposa y socio de negocios fueron arrestados y se les presentaron cargos formales. No fue hasta tres años después tiene su día en corte el político.
Al concluir el primer día de juicio el juez le pidió al jurado que se abstenga de hablar sobre el caso, ver medios noticiosos y no exponerse a las redes sociales.
Molina se declaró no culpable de los 11 cargos que se le imputan y su caso está a cargo del juez Luis M. Singleterry. El jurado en el caso contra el político está integrado por 11 mujeres y un hombre.
Molina enfrenta cargos de orquestar un presunto engaño en una votación durante su propia elección de alcalde. Según la Oficina del Fiscal de Texas, Molina y su esposa hicieron que numerosos votantes cambiaran sus direcciones a lugares en los que en realidad no vivían, incluyendo un complejo de departamentos de su propiedad, con el propósito expreso de que votaran por Molina en la elección municipal de Edinburg del 7 de noviembre de 2017.
El presunto engaño para recolectar votos incluyó la supuesta participación de trabajadores de campaña pagados, entre otros. Molina ganó la elección, derrotando por 1,240 votos a Richard García, quien llevaba largo tiempo como alcalde de Edinburg.
Al menos 18 personas fueron arrestadas con relación al engaño de votación tras una investigación con la ayuda del Departamento de Seguridad Pública y los Texas Rangers.
Molina no es el único alcalde en problemas ya que tan reciente como la semana, específicamente el 11 de agosto, el alcalde de Peñitas, Rodrigo López, se declaró culpable de fraude relacionado a la venta de equipo deportivo al Distrito Escolar de la Joya. El político será sentenciado el próximo 31 de octubre. En ese momento, López podría enfrentar una condena de hasta 10 años de prisión.
