SAN JUAN- Miles de feligreses de diferentes partes de Texas acudieron a la Basílica de Nuestra Señora San Juan del Valle para participar en una ceremonia muy especial.
Y es que muchas personas viajaron desde Laredo, Houston, Austin y otros lugares para recibir las reliquias del Padre Pío.
El Padre Pío, también conocido como Pío de Pietrelcina, falleció el 23 de septiembre de 1968. Pero, antes de su muerte, tenía miles de fieles seguidores ya que fue el único padre en presenciar los estigmas de la religión católica.
“Era un padre que se dedicaba a confesar, horas y horas. Es el único sacerdote que ha tenido los estigmas de Jesús, las llagas de Jesús en su cuerpo. Por 50 años la tuvo. Podía leer la mente, los pensamientos de la gente. Un buen confesor, pero también el poder de sanación, de sanar el alma y el cuerpo,” explicó en Padre Jorge Gómez, rector de la Basílica de Nuestra Señora San Juan del Valle.
La congregación tuvo la oportunidad de hacer sus peticiones, e incluso, algunos tomaron su fotografía como recuerdo de esta ceremonia que culminó con una misa en su honor.
