WASHINGTON DC — Algunos republicanos opinan que los problemas de reclutamiento del ejército se deben a que los jóvenes no desean vacunarse contra el COVID-19 o por temas raciales y de justicia social. Sin embargo, el servicio militar dice que los obstáculos más grandes son los más tradicionales: los jóvenes no quieren morir o lesionarse, lidiar con el estrés de la vida militar y poner su vida en suspenso.
Ellos “simplemente no ven al ejército como algo relevante”, dijo el mayor general Alex Fink, jefe de marketing del ejército. “Nos respetan, pero no somo relevantes en sus vidas”.
Abordar esos añejos problemas se ha vuelto más urgente mientras el ejército trata de recuperarse de su peor año de reclutamiento en décadas, una situación agravada por el ajustado mercado laboral. Se ofrecen nuevos programas, publicidad e incentivos con el objetivo de cambiar las percepciones y revertir el declive.
Recibe las noticias locales y los pronósticos del tiempo directo a tu email. Inscríbete para recibir newsletters de Telemundo McAllen aquí.
Un incentivo otorga a los reclutadores bonificaciones de hasta $4,500 por trimestre si superan el requisito mínimo de alistamiento. Un programa piloto asciende a los soldados más jóvenes si refieren a alguien que se alista y asiste a un entrenamiento básico.
Al ejército le faltaron unos 15,000 soldados para alcanzar su objetivo de reclutamiento de 60,000 el año pasado. La meta para este año es reclutar a 65,000, lo que sería 20,000 más que en 2022.
El ejército envió hacer encuestas para ayudarse a identificar por qué los jóvenes descartan la carrera militar.
Esas encuestas se realizaron durante cuatro meses la primavera y el verano pasados e involucró a unos 600 encuestados, de 16 a 28 años, por mes. El ejército discutió los hallazgos generales con The Associated Press, pero se negó a proporcionar una metodología detallada, diciendo que fueron realizadas por un contratista de investigación privado y que no podía divulgar algunos datos.
Los funcionarios dijeron que, según las encuestas, los jóvenes simplemente no ven al ejército como un lugar seguro o una buena carrera profesional, y creen que tendrían que suspender sus vidas y carreras si se alistaran.
Además, muy pocos se sienten disuadidos de alistarse debido a temas de justicia racial y social, al contrario de lo que opinan algunos grupos, especialmente los conservadores, sobre la falta de reclutamiento.
De hecho, las preocupaciones sobre la discriminación contra las mujeres y las minorías se consideran un problema mayor, junto con una desconfianza más general hacia las fuerzas armadas.