Policia de Harlingen

Acusan a hombre por muerte de persona encontrada con disparo en el rostro

Telemundo

Juan José Martínez, de 45 años, enfrenta una fianza de $2 millones luego de que las autoridades lo identificaran como el presunto autor de la muerte de un hombre hallado con un disparo en el rostro dentro de un auto en el 1900 de la calle Lozano, en Harlingen.

Según un comunicado de prensa, luego de una investigación policiaca se determinó que el auto mencionado anteriormente es similar a uno que supuestamente fue usado para cometer otro crimen el día antes a esta muerte. Se trata del fallecimiento de un hombre que le tocó la puerta a un vecino y este no abrió por temor. Posteriormente esta persona, Antonio Torres, de 48 años, fue hallada sin vida.

Martínez enfrenta un cargo de homicidio y otro de asalto agravado. Por el primer cargo la fianza es de $2 millones y por el segundo $100,000.

Con relación al crimen de Torres las autoridades realizaron un operativo el miércoles. La investigación por su muerte tomó un nuevo giro con la detención de dos hombres que presuntamente podrían estar vinculados al crimen y quienes ya fueron detenidos por varios cargos relacionados a drogas.

La Oficina del Alguacil del Condado Cameron señaló en un comunicado de prensa que se sospecha que el arma utilizada para asesinar al hombre estaba siendo escondida en la cuadra 800 de la calle Pitman, en Harlingen. Durante el cateo las autoridades afirman haber encontrado dinero, armas, municiones, bolsas con Xanax, crack y marihuana.

Aunque las autoridades encontraron armas en el lugar, en este momento no las han vinculado categóricamente con la muerte de Torres.

A raíz de este cateo, fueron detenidos Ryan Puga, de 20 años, y Rico Jerome Rosales, de 30. Ambos enfrentan cargos de manufacturar / sustancias controladas y posesión de drogas. Ambos fueron trasladados al Centro de Detención de Carrizales Rucker, en el Condado Cameron.

En el condado Guilford, Carolina del Norte, unas personas conducían por la carretera y vieron una maleta al costado de la carretera. Notaron que algo se movía, así que se detuvieron, retrocedieron, fueron allí y vieron una nariz perruna que sobresalía de una de las esquinas.
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