En el Valle del Río Grande nació un nuevo movimiento formado por activistas que han estado en luchas civiles históricas que buscan compartir sus experiencias con la comunidad y a enseñarles a cómo organizarse para derrotar la ley SB4.
A medida que va acercándose la fecha en que entraría en vigor esta ley, que es el primero de septiembre, grupos de defensa civiles van planificando estrategias para ejercer más presión a las autoridades.
Por ejemplo, la semana pasada la organización LUPE hizo un llamado a McAllen para que se uniera a otras ciudades en la demanda al estado de Texas para bloquear la SB-4.
En Weslaco, cinco veteranos activistas pertenecientes a organizaciones históricas como el movimiento chicano y el campesino, se unieron para crear una estrategia diferente para luchar en contra de la SB4. El grupo recién formado busca empezar a fortalecer su lucha desde el barrio y la colonia con verbenas populares que también enseñen a la comunidad sobre los efectos de esta nueva ley.
El primer evento se llevará a cabo en Weslaco y de ahí avanzarán llevando su propuesta con el fin de que sea la gente misma quien ejerza presión.